En los últimos meses hemos estado trabajando en diferentes puntos internos del colectivo y gestiones desde nuestro Grupo Morado que han implicado el seguimiento de algunos casos que se nos habían reportado sobre violencias ejercidas o incomodidades generadas por parte de personas de la comunidad de Poliamor Madrid.
Desde hace al menos 2 años estamos trabajando con una intención anti-punitivista, ofreciendo a las personas que han causado daños graves a otras un seguimiento en un proceso de motivación del cambio*.
Creemos que los vetos de personas, sin ningún tipo de trabajo extra, solo consiguen que las personas que han ejercido violencias, causado incomodidades o daños, vayan a hacer lo mismo en otros lugares (y por lo tanto sólo le pasamos “el problema” a otros espacios o colectivos).
Por eso trabajamos también con el apoyo del resto de espacios que las personas implicadas frecuentan (cuando estos quieren y/o pueden implicarse), y así poder hacer un seguimiento de los comportamientos que deben cambiarse.
Somos conscientes de que, al igual que todo el mundo, tenemos nuestros sesgos y subjetividades, y por ello habrá puntos que interfieran por nuestra visión de las situaciones. Intentamos en todo momento hacer lo mejor posible y estamos abiertes a feedback contextualizado sobre los procesos de gestión.
No todas las personas con las que tratamos de llevar adelante uno de estos procesos aceptan realizar su trabajo personal y reparación a las víctimas cuando es necesario. En estos casos en los que obtenemos una negativa, no hay reconocimiento de los hechos y/o simplemente justificaciones, no sentimos tener otra opción más que la de alejarlas de nuestros espacios para tratar de hacerlos más seguros.
Algunas personas sí tienen la intención de reconocer los daños causados y reparar lo necesario, y es en estos casos cuando activamos un proceso de motivación del cambio. El trabajo en estos procesos es complejo, y requiere de mucho tiempo, cuidado y energía por todas las partes implicadas:
- Apartamos temporalmente de nuestros espacios a la persona que cometió agresiones.
- Realizamos internamente un análisis exhaustivo de las conductas de la persona que ha causado los daños en base a los testimonios recogidos, y nos aseguramos de que comprende e interioriza todos los puntos que se le señalan.
- Aunque no tenemos capacidad para poder ofrecer una atención personalizada de seguimiento en el día a día, si la persona lo necesita, ponemos sobre la mesa recursos que podrían ayudarle en su proceso de cambio. Pero la idea es que la persona que ha cometido las violencias se responsabilice de su propio cambio.
- Involucramos a personas de su círculo más cercano y otras que tienen contacto más superficial o casual, realizando entrevistas periódicas para ir monitorizando el trabajo realizado y corroborando el cambio.
- Una vez corroborado el cambio en base a los diversos testimonios, y si no existe ninguna víctima que haya solicitado como cuidado el no coincidir en los mismos espacios, la persona que ha estado trabajando en este proceso de cambio puede volver gradualmente a nuestra comunidad, donde nos encargamos de asegurarnos de que las conductas señaladas efectivamente han cambiado.
Queremos agradecer a todas las personas y colectivos que en los últimos meses se han ofrecido a colaborar en alguno de estos procesos, reuniéndose con nosotres y trabajando en conjunto para hacer este complejo seguimiento e ir corroborando que el cambio necesario se estaba dando.
Sabemos que ninguna persona somos segura al 100%. Ni quienes han pasado por un proceso como estos, ni de quienes no se ha recibido ningún feedback, ni las propias personas que organizamos y proponemos los espacios de Poliamor Madrid. A pesar de que nos atraviesen diferentes opresiones, siempre somos susceptibles de cometer violencias de todo tipo. Por ello nos reiterarnos en nuestra apertura a la recepción de feedback sobre cualquier persona de la comunidad, incluyendo a las personas que conformamos la organización de Poliamor Madrid. En los casos en los que el feedback implica a alguna persona de la organización, ya sea por cometer agresiones o por recibirlas, esta queda apartada del proceso de gestión interna.
Nuestra intención nunca es la de señalar a las personas que han cometido agresiones y simplemente apartarlas, sino la de trabajar conjuntamente para que los espacios puedan ser más seguros gracias a que esas actitudes que han provocado las violencias se reconozcan, se trabajen y no se vuelvan a repetir.
Si alguna vez has estado en nuestros espacios y cualquier persona, asistente u organizadora, te ha hecho sentir incómode, violentade, sientes que te ha manipulado o ha abusado de ti, puedes contactar con nuestro Grupo Morado por email, Telegram o a través del formulario online que permite dejar tu testimonio de manera anónima. Puedes encontrar todos los enlaces desde nuestros links en la bio.
También, si te resulta difícil (o imposible) compartir espacio con alguna persona de la comunidad porque te ha violentado en alguna ocasión (haya sido parte de algún proceso de motivación del cambio o no), puedes contactarnos para asegurarnos de que podemos gestionar la situación adecuadamente.
*Nota sobre excepciones
Estos procesos no se llevan a cabo en dos tipos de situaciones diferentes:
- Cuando las violencias se dan en medios digitales, como es el caso de personas saltándose las normas de nuestros espacios online. Hacemos un ejercicio de moderación mucho más simple que normalmente implica la expulsión o bloqueo de nuestros espacios si la respuesta no es positiva frente al señalamiento de la conducta que se ha saltado nuestras normas.
- Cuando se valora que la violencia no supone un riesgo grave para la comunidad o une de sus integrantes, no se repite en el tiempo y/o se aprecia intención de cambio real. Un ejemplo son los casos de comentarios “casuales” capacitistas, racistas, clasistas, etc. que tenemos integrados en el lenguaje; del estilo “he ido a comprar al chino” o “la fiesta fue una locura”. Los señalamos cuando los detectamos y pedimos que no se repitan, cosa que si ocurriera de manera deliberada, sí implicaría una gestión diferente y más profunda. Entendemos que la evaluación de la gravedad de estos asuntos es siempre muy subjetiva y está siempre relacionada con las opresiones y privilegios de cada une, y siempre estamos abiertes a recibir feedback sobre la moderación en nuestros espacios. También entendemos que todas las personas de la comunidad estamos aprendiendo constantemente y valoramos sobre todo esta actitud de cambio y mejora.